Plinio el
Viejo, Historia Natural II 186: Informes de Piteas acerca de Tule.
“(...)
en los días del solsticio de verano, cuando el sol se acerca más al polo, las
zonas de la Tierra aquí situadas, tienen días seguidos durante seis meses e
igualmente son las noches en el solsticio de invierno. Piteas de Masilia
(Marsella) relata que esto es lo que ocurre en la isla de Tule, distante de
Britania seis días de navegación rumbo N.”.
(Trad. de Ana
Mª Moure Casas, Gredos, 1990)
Plinio el
Viejo, Historia Natural VI 104: Tule no puede identificarse con Escandinavia, las
Hébridas, las Hórcadas o las Shetland.
“La
última isla de todas las que se conocen es Tule, en la que ya hemos dicho que
en el solsticio de verano no hay noches, al pasar el sol el signo de Cáncer, y
en el de invierno, sin embargo, no hay días. Algunos piensan que esto sucede
seis meses seguidos. (...) Hay autores que citan además otras islas: las
Escandias (islas de Dinamarca o Escandinavia), Dumna (Lewis, al N. de las
Hébridas), Bergos (Hoy) y Berrice (Mainland, la mayor de las Shetland) la mayor
de todas, desde la que se emprende la navegación a Tule. A un día de navegación
de Tule se encuentra el mar congelado llamado por algunos Cronio”.
(Trad. Mª Luisa Arrribas)
Estrabón, Geografía IV 5,5: Estrabón no da ningún crédito a las informaciones
de Piteas.
“La
información sobre Tule es confusa a causa de su lejanía. La sitúan en la parte
más septentrional del mundo. Lo que Piteas ha dicho sobre ella y sobre otros
lugares cercanos a ella es pura invención”.
(trad. García Ramón, García Blanco, Gredos, 1991)
Ibi, II 4, 1
“Piteas
ha cometido muchos errores como cuando afirma que ha recorrido toda Britania
(...) y cuando cuenta historias de Tule y aquellos lugares en los que no hay
tierra propiamente dicha ni mar ni aire, sino una cierta mezcla de estos
elementos parecida a la medusa y en la que afirma que la tierra, el mar y todo
está suspendido y es como si aprisionase a todas las cosas (...) Dice que al
regresar, había recorrido toda la costa oceánica desde Gadira hasta el Tanais
(río Don)”.
Ibi, I 4, 2
“Afirma
Piteas que Tule dista de Britania seis días de navegación en dirección Norte y
que está cerca del mar helado (...) y dista unos 34.500 estadios desde Alejandría
en su mismo meridiano”.
Ibi, I 4, 3
“El
que informa de Tule, Piteas, está considerado como un gran mentiroso, por tanto
la distancia el Borístenes (el río Dnieper) y el paralelo que pasa por Tule no
ha de ser tenida en cuenta (...). Lo mismo en relación a la longitud de
perímetro de la isla que él estima en más de 20.000 estadios”.
Procopio de
Cesarea, Guerra de los Godos VI 15: este autor, al hablar de Tule, parece referirse a Escandinavia.
“Tule
es una isla grande, diez veces más grande que la de Bretaña en la que una parte
es desierto, pero otra está habitada por treinta pueblos gobernados cada uno
por un rey; el sol, en la época del solsticio de verano está por encima de
encima del horizonte durante cuarenta horas y en el solsticio de invierno, está
ausente durante cuarenta horas”.
(Tomado de Aujac, “L´île de Thulé, de Pytheas à Ptolémée”, p. 190)
(Tomado de Aujac, “L´île de Thulé, de Pytheas à Ptolémée”, p. 190)
Pseudo
Ético, Cosmografía, 38: Tule está más allá del mundo conocido.
« La
isla de Tule, que se extiende muy lejos de las demás separada por un espacio
infinito y situada en medio del Océano, se considera conocida apenas de unos
pocos ».
(Trad. de A. García-Toraño, Gredos, 2002)
Pomponio
Mela, Corografía III 47: Tule y el
sol de medianoche.
« Tule, celebrada por los poemas griegos y los
nuestros, se sitúa enfrente de la costa de los belgas. Aquí, como el sol en su
caída se mantiene levantado a lo lejos, ciertamente las noches son breves, pero
en invierno son oscuras, en verano luminosas porque en esa estación cuando sale
el sol está más alto (...)”
(Trad. propia)
([47]
Thyle Belcarum litori adposita est, Grais et nostris celebrata carminibus. In
ea, quod ibi sol longe occasurus exsurgit, breves utique noctes sunt, sed per
hiemem sicut aliubi obscurae, aestate lucidae, quod per id tempus iam se altius
evehens, ...)
Pomponio
Mela, Corografía III 44: para Mela, Escandinavia es una isla.
“Treinta
son las Órcadas, separadas entre sí por estrechos canales, siete las Hemodas
frente a las costas de Germania. En su golfo, al que llamamos Codano, de entre
ellas destaca Escandinavia tanto por su fertilidad como por su tamaño, que está
en poder de los Teutones”.
(Trad. propia)
([44]
Triginta sunt Orcades angustis inter se diductae spatiis, septem Haemodae
contra Germaniam vectae. In illo sinu quem Codanum diximus ex iis Scadinavia,
quam adhuc Teutoni tenent, et ut fecunditate alias ita magnitudine antestat.)
Tácito, Agrícola X 4. La flota de Agrícola avista Tule aunque no logra
llegar hasta la Isla.
“Después
de rodear, entonces por vez primera, una flota Romana la costa de éste, el
último de los mares, confirmó que Britania era una isla y, al mismo tiempo,
descubrió y conquistó unas islas desconocidas hasta aquel momento, las Órcadas.
También otearon Tule, puesto que hasta aquí llegaban sus órdenes y se acercaba
el invierno. Pero aquel mar pesado y difícil para remar ni siquiera se agita
por los vientos. Creo que se debe a que por aquella región hay pocas tierras y
montañas, que son la causa y el motivo de las tormentas, y el inmenso peso de
un mar sinfín resulta más difícil de mover”.
(Trad. propia)
(Hanc oram novissimi maris tunc primum
Romana classis circumvecta insulam esse Britanniam adfirmavit, ac simul
incognitas ad id tempus insulas, quas Orcadas vocant, invenit domuitque. Dispecta est et Thule, quia hactenus iussum, et hiems
adpetebat. Sed mare pigrum et grave remigantibus perhibent ne ventis quidem
perinde attolli, credo quod rariores terrae montesque, causa ac materia
tempestatum, et profunda moles continui maris tardius impellitur.)